
El gobierno suspende por 60 días el polémico decreto de certificaciones médicas, habilitando una negociación con el gremio estatal COFE. La medida busca acercar posiciones y revisar una normativa que generó fuerte rechazo sindical desde su implementación en abril de 2024.
Desde el 1º de julio y hasta el 30 de agosto, se dejará sin efecto la disposición que limitaba al 75% del salario los días de licencia médica a partir del décimo día hábil. Este punto fue uno de los principales focos de conflicto. La suspensión temporal busca crear un espacio para el diálogo y la búsqueda de mejoras al decreto original.
La decisión fue celebrada por el PIT-CNT en la Conferencia de la OIT en Ginebra, donde Jorge Bermúdez denunció que el anterior gobierno «desvirtuó totalmente la negociación colectiva en el sector público» con la «imposición de un nuevo sistema de licencias por enfermedad que perjudica y quita derechos adquiridos a los trabajadores estatales». Bermúdez destacó la apertura al diálogo y el acuerdo alcanzado.
En contraste, el exministro de Trabajo, Pablo Mieres, calificó la suspensión como «un error». Según Mieres, la normativa anterior «iba en la dirección correcta de acercar la situación entre trabajadores públicos y privados y no generar incentivos para que pueda haber un uso abusivo de las certificaciones médicas». El exjerarca atribuyó la «marcha atrás» del Poder Ejecutivo a la «presión sindical».