El Comité de Erradicación del Trabajo Infantil (CETI) lideró una jornada de sensibilización en el marco del Día Mundial contra el Trabajo Infantil, donde se enfatizó la necesidad de una estrategia colectiva y actualizada para erradicar esta problemática que afecta a niños, niñas y adolescentes en Uruguay. La preocupación principal radica en la falta de datos recientes y la persistencia de la explotación infantil.
El Inspector General del Trabajo y de la Seguridad Social, Luis Puig, fue contundente al afirmar que el trabajo infantil está directamente vinculado a la pobreza y la desigualdad, desmintiendo cualquier relación con una «cultura del trabajo». «El trabajo infantil no tiene nada que ver con la cultura del trabajo, sino con una cultura de explotación que relega los aspectos fundamentales del desarrollo humano», sentenció Puig, subrayando que «dar esta batalla cultural y social es una responsabilidad colectiva». Además, el jerarca hizo un llamado urgente a contar con datos actualizados sobre la situación del trabajo infantil en el país, ya que la última medición disponible es de 2010. Indicó que estudios anteriores estimaban entre 60 y 90 mil niños, niñas y adolescentes trabajando, y que actualmente se está procesando nueva información para tener una «aproximación más cabal» en las próximas semanas.
Por su parte, el vicepresidente del INAU, Mauricio Fuentes, instó a reflexionar sobre la concepción misma del trabajo infantil: «La primera pregunta que creo que tenemos que hacernos es cómo estamos mirando, qué estamos entendiendo por trabajo infantil». Fuentes también abordó la forma de encarar el problema, señalando que «Es necesario hacer acciones para fortalecer a los gurises frente a eventuales situaciones que impliquen un riesgo para ellas y ellos sí, sin duda, pero también es necesario entender que el trabajo infantil forma parte de una manera de construir la sociedad que hemos adoptado desde hace años y que genera daños».
La jornada contó con la participación de la directora general de Secretaría del MTSS, Laura Bajac; el coordinador de programas de UNICEF, Michel Guinand; el representante de ANONG, Fernando Olivera; el delegado de la Cámara Nacional de Comercio y Servicios, José Pedro Derrégibus; y el presidente del PIT-CNT, Marcelo Abdala. Todas las intervenciones coincidieron en la urgencia de adoptar un enfoque interinstitucional y ético para proteger a los niños, niñas y adolescentes en situaciones de vulnerabilidad.